RECOLECCIÓN Se plantan desde octubre hasta abril, según los climas, pero comúnmente en
otoño. "Los ajos, por Navidad, ni nacidos ni por sembrar", dice el refrán. Se cogen a finales de primavera o al empezar el verano: "Por San Pedro,
se arranca el ajo y se siembra el puerro". Se comienza la recolección cuando se observa que han marchitado alrededor
del 20 % de las plantas. Una vez arrancados los bulbos hay que dejarlos en el
campo hasta que las hojas se sequen totalmente. Entonces se trenzan sus
hojas y tallos, ya de color pajizo, las ajaspajas, apunto de secarse, y se forman
ristras u horcas de dos ramales, con las cabezas muy bien ordenadas. Así enhorcados, los ajos se acaban de secar y se conservan en lugares frescos y ventilados hasta que vienen los nuevos. CURIOSIDADES: El ajo es una planta medicinal que todos deberíamos usar y conocer, si somos
observadores hay muchas personas que han vivido muchos años y eran
consumidores habituales de ajos.
Sus propiedades están basadas sobre todo en la gran cantidad de azufre que
contiene, además tiene calcio, fósforo, hierro, sodio, potasio, vitaminas A, B, C,
y Nicotinamida.
Es un alimento que produce calor y sequedad, por lo tanto está indicado en
todas las dolencias donde exista frío y humedad como los catarros,
reumatismos, etc.
Históricamente, originario de Asia, el ajo llegó al Próximo Oriente hace por lo
menos cuatro mil años. Los antiguos egipcios hacían gran caudal de ellos, no solo, como condimento,
sino como alimento, y por sus virtudes medicinales.
En el IV libro de Moisés, comúnmente llamado de los "Números" se lee: "Nos acordamos mucho del pescado que comíamos en Egipto de balde, de los cohombros y de los melones, y de los puerros, y de las cebollas,
y de los ajos". USOS AJO CRUDO: de 1 a 4 dientes al día. La dosis diaria recomendable sería un diente de ajo al día, pero en casos de dolencias graves, como reumatismo deben tomarse varios.
Siempre tiene mucho más poder curativo en estado natural que en forma de
cápsulas.
Una forma de tomarlo, si sienta mal o se repite, es cortándolo en trocitos,
echándolo con un poco de agua en un vaso y beberlo como si fuera una
pastilla sin masticarlo. También se utiliza como condimento.
Allioli: se machaca una cabeza de ajos con sal y se va añadiendo, aceite de
oliva, dando vueltas con el mortero, debe quedar una salsa espesa. POLVO: 1 - 3 g/día, en cápsulas de 300 - 500 mg.
EXTRACTO FLUIDO (1:1): 30 a 50 gotas, con un poco de agua, de una a tres
veces al día.
TINTURA (1:5): 50 a 100 gotas, dos o tres veces al día. Tintura tradicional:
Macerar, durante 10 días, al abrigo de la luz y en refrigeración,
25 g de dientes frescos en 60 ml de ron o solución hidroalcohólica (40 %).
Conservar en frío. Aplicar directamente la tintura en la zona afectada 2 veces al día.
EXTRACTO SECO (5:1): 100 a 200 mg, 1- 3 veces al día. ACEITE ESENCIAL: en solución oleosa o alcohólica. FRESCO: Popularmente se aplica una rodaja de ajo fresco sobre las zonas hiperqueratósicas, especialmente verrugas plantares. Recomendamos proteger las zonas circundantes con vaselina filante. ÓVULOS VAGINALES (candidiasis vaginales): 500 mg de extracto seco/óvulo.
Un óvulo cada noche (Peris, 1995). Dosis recomendada por la E.S.C.O.P.: - Profilaxis de la arteriosclerosis (adultos): 6-10 mg de aliína al día (aprox.
3-5 mg de alicina, equivalente a un diente de ajo o a 0,5-1 g de polvo de ajo). - Afecciones respiratorias: 2-4 g de polvo o 2-4 ml de tintura 1:5, tres veces al
día. OTROS USOS: El jugo permite horadar el vidrio. Mezclado en el pienso de las gallinas,
incrementa la
puesta de huevos. Puesto entre la fruta, retrasa su maduración.
También neutraliza el veneno de los insectos y los mantiene alejados. INDICACIONES Tiene multitud de propiedades medicinales reconocidas, entre las que
destacan: EN EL SISTEMA CIRCULATORIO Es un excelente depurador de sustancias tóxicas y por eso debemos tomarlo
siempre que nos hayamos intoxicado, por ejemplo con marisco o pescado.
Disminuye notablemente los niveles de grasas como el colesterol,
los triglicéridos y el ácido úrico.
Hace la sangre más fluida, con lo cual previene la formación de trombos y
coágulos. Inhibe en la sangre el crecimiento y desarrollo de bacterias peligrosas
como la de la meningitis, tifus, difteria, neumonías y las responsables de
diferentes abscesos.
Actúa favoreciendo la siminución de glucosa en la sangre por lo que
conviene a los diabéticos.
Regula la tensión arterial, sobre todo cuando está alta debido a que produce
vaso dilatación. Disminuye el número de latidos cardiacos, de así que sea muy
útil para prevenir y curar anginas e infartos.
Previene la arteriosclerosis con la formación de placas en las arterias. EN EL APARATO LOCOMOTOR En artrosis, osteoporosis, reumatismo, al favorecer la eliminación de residuos
tóxicos de las articulaciones y amentar la microcirculación, con el consiguiente
aumento de nutrientes y minerales al hueso. APARATO DIGESTIVO: Es un antibiótico potente, elimina las bacterias perjudiciales y respeta la flora
bacteriana (bacterias intestinales buenas).
Elimina los gases intestinales y las putrefacciones. Favorece las digestiones
al ayudar a las segregaciones salivares y gástricas. Previene y cura la apendicitis. Mata toda clase de parásitos intestinales, tipo larvas ylombrices. Corta la diarrea y es laxante en el caso de estreñimiento.
Aumenta la secreción biliar y estimula su expulsión desde la vesícula al
tubo digestivo. ORGANOS SEXUALES: Úsalo en el caso de tener impotencia o frigidez, aumenta además el apetito
sexual.
En la mujer regula la regla, la favorece, y la hace más abundante. No usarlo
si hay cualquier hemorragia o exceso de sangrado al menstruar. APARATO RESPIRATORIO: Desinfecta todo: garganta, faringe, bronquios. Útil en resfriados, bronquitis,
neumonías. Expectorante y descongestionante. Bueno en el asma.
Sirve para limpiar los efectos del tabaco a nivel pulmonar. PIEL: Cicatriza heridas que no cierran. Se fríen ajos en aceite de coco y se echa a la herida.
Aplicado externamente quita las verrugas. Útil en el herpes y en los
hongos externos e internos.
En los piojos y caspa untar la cabeza con ajo y miel. SISTEMA ENDOCRINO: Aumenta el funcionamiento de la glándula tiroides, por lo cual está indicado en la obesidad y el hipertiroidismo.
Estimula la liberación a la sangre de la insulina por parte del páncreas por lo
que ayuda en la diabetes a regular los niveles de glucosa.
Favorece la secreción de corticoides internos por las glándulas suprarrenales,
de ahí la clave de todas sus propiedades, pues ya se sabe que la medicina
utiliza los corticoides en procesos alérgicos, problemas pulmonares, reumatismos. SISTEMA INMUNITARIO O DEFENSIVO: Fortifica las defensas frente a cualquier clase de infección (bacterias, virus,
hongos, parásitos), como por ejemplo: En la peste de Tolouse en 1620 usaron el ajo cuatro ladrones para saquear las casas en las que estaban los
que habían muerto por esa enfermedad, después confesarón su secreto.
También impide y previene cualquier clase de cáncer. APARATOURINARIO: Estimula la formación abundante de orina, con lo que ayuda a eliminar toxinas. SISTEMA NERVIOSO: Se sabe que el ajo es un antidepresivo por excelencia, debido a que
aumenta enormemente la vitalidad, y por consiguiente la calidad de vida.
Mantiene la mente despejada y lúcida. PRINCIPIOS ACTIVOS Abundantes fructosanas (hasta un 76%). Aceite esencial (0,2 - 0,3%):
garlicina, aliína o sulfóxido de alilcisteína (1%), que es hidrolizada por la linaza produciendo alicina (responsable del olor característico del ajo), que se
transforma rápidamente en disulfuro de lilo (se considera que 1 mg de liína
equivale a 0,45 mg de alicina).
Pequeñas cantidades de vitaminas ( A, B1, B2, B6, C),
adenosina, sales minerales : hierro, sílice , azufre, yodo. CONTRAINDICACIONES Puede causar dermatitis por contacto. La ingestión continuada puede
acarrear trastornos digestivos y renales.
El aceite esencial puro puede provocar náuseas. No prescribir el aceite
esencial puro por vía oral durante el embarazo, la lactancia, a niños pequeños
o a pacientes con hipersensibilidad a la droga o sus componentes.
No prescribir formas de dosificación con contenido alcohólico a niños
menores de dos años ni a consultantes en proceso de deshabituación
etílica.
EFECTOS SECUNDARIOS
El consumo de ajos, debido a las drusas de oxalatos, puede producir irritación
intestinal. Por vía externa puede producir dermatitis de contacto, por su efecto vesicante. |